Dos voces en el extranjero

El de hoy es un gran día para la prensa. Alan Johnston, periodista de la BBC secuestrado hace 114 días, ha sido liberado. Se ha convertido en un símbolo tanto cuando le secuestraron como en su liberación, con Haniyé queriendo ganarse el favor internacional en su lucha perdida por Palestina.

Me acordaba al leerlo de la sorpresa que me llevé al empezar a estudiar periodismo, hace ya algunos años: pensaba que la mayoría de mis compañeros querrían especializarse en deportes. Pero no, la no pocos ansiaban ser reporteros de guerra. Con el paso del tiempo la cordura se iba imponiendo y cada vez quedan menos: no conozco a ninguno que lo haya hecho. Ya saben, la concepción romántica del periodismo.

La historia de Johnston, con final feliz, me recuerda (aunque menos trágica) a la de Rosa María Calaf. Leía este fin de semana un reportaje que dedicaba El País Semanal a la veterana corresponsal de TVE, a la que atribuye (no sin acierto) el don de la ubicuidad. Si piensan en una mujer de pelo rojo con mechón blanco recordarán haberla visto en infinidad de puntos del globo, micrófono en ristre, informando de las más variopintas cosas y en las más variopintas situaciones: desde metida en un río a montada en bicicleta (y eso que otros corresponsables se limitan al 'Control C - Control V'.

Cuenta el reportaje sobre Calaf que un día le llegó un mail: "¿Deseaba acogerse al expediente de regulación de empleo de RTVE, que prevé la prejubilación de los 4.100 empleados que cumplen 50 o más años en 2007?". Cuando pensaba que se marchaba a casa y se ponía punto y final a un periplo (nunca mejor dicho) que inició con 25 años, le llegó la oferta del nuevo 'jefe', Luis Fernández, de ir a cubrir las olimpiadas de 2008. Y ella, encantada.

Dos visiones de las corresponsalías, una trágica con final feliz y una emotiva, también con final feliz. Lástima que otros compañeros, veteranos igual, no hayan sobrevivido a la 'guerra' de la jubilación anticipada. Es el caso de Valentín Requena, la voz de los mundiales de motociclismo, al que tuve el gusto de entrevistar.