Estaba intentando conciliar el sueño esta mañana, poco después de que nuestra recién adquirida cachorra de Beagle decidiera -otro día más- que ya era un momento adecuado para levantarme. Claro, ella luego seguiría durmiendo. Y en ese estado de duermevela a uno se le ocurren cosas portentosas.
Dormirse pensando en algo hace que, a veces, sueñes cosas vinculadas de alguna forma a ese algo. Y yo esta mañana he soñado con mi perra. Soñaba con ponerle algo cuando apriete el invierno madrileño y haya que sacarla a pasear. "Pero los jerseys caninos son horrendos", me decía a mí mismo. Así que, en mis sueños, me dirigía a una tienda que sí existe, de nombre ingenioso (de esos que parece que sólo existen en Chueca): Pet a porter (juro que no me patrocinan).
Pero no encontraba solución, así que decidía encargar a la abuela de mi señora varios jerseys, todos ellos con inscripciones más o menos ingeniosas del tipo "I'm with stupid" para lucir al lomo del can. A saber:"Soy yo quien le paseo".
"Espacio reservado para su publicidad".
"Ponga un humano en su vida".
"Yo no muerdo, pero él sí".
"Sí, puedes tocarme".
"No, señora, mono no, perro".
"El sueño de la razón..." (pequeño apunte cultural)
miércoles, mayo 23, 2007
Camisetas para el perro
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